2 Samuel 23

Ultimas Palabras de David

1 Estas son las últimas palabras de David: “Declara David, el hijo de Isaí, Y declara el hombre que fue exaltado, El ungido del Dios de Jacob, El dulce salmista de Israel:

2 El Espíritu del Señorhabló por mí, Y Su palabraestuvoen mi lengua.

3 Dijo el Dios de Israel, Me habló la Roca de Israel: ‘El que con justicia gobierna sobre los hombres, Que en el temor de Dios gobierna,

4 Es como la luz de la mañanacuandose levanta el sol En una mañana sin nubes,Cuando brotade la tierra la tierna hierba Por el resplandordel soltras la lluvia.’

5 En verdad, ¿no es así mi casa para con Dios? Pues El ha hecho conmigo un pacto eterno, Ordenado en todo y seguro. Porque toda mi salvación y todomideseo, ¿Noloshará ciertamente germinar?

6 Pero los indignos, todos ellos serán arrojados como espinos, Porque no pueden ser tomados con la mano;

7 Y el hombre que los toque Ha de estar armado con hierro y con asta de lanza, Y por fuego serán consumidos completamente ensulugar.”

Los Valientes de David

8 Estos son los nombres de los valientes que tenía David: Joseb Basebet el Tacmonita, principal de los capitanes; éste erallamadoAdino el Eznita, por los 800 que mató una vez.

9 Y después de él, Eleazar, hijo de Dodo el Ahohíta, uno de los tres valientesque estabancon David cuando desafiaron a los Filisteos que se habían reunido allí para la batalla y se habían retirado los hombres de Israel.

10 El se levantó e hirió a los Filisteos hasta que su mano se cansó y se quedó pegada a la espada; aquel día el Señorconcedió una gran victoria. El pueblo volvió en pos de él,perosólo para despojara los muertos.

11 Después de él,fueSama, hijo de Age el Ararita. Los Filisteos se habían concentrado en tropa donde había un terreno lleno de lentejas, y el pueblo había huido de los Filisteos.

12 Pero él se puso en medio del terreno, lo defendió e hirió a los Filisteos; y el Señorle concedió una gran victoria.

13 Descendieron tres de los treinta jefes y fueron a David en la cueva de Adulam al tiempo de la cosecha, mientras la tropa de los Filisteos acampaba en el Valle de Refaím.

14 Davidestabaentonces en la fortaleza, mientras la guarnición de los Filisteosestabaen Belén (Casa del Pan).

15 David sintió un gran deseo, y dijo: “¡Quién me diera a beber agua del pozo de Belén que está junto a la puerta!”

16 Entonces los tres valientes se abrieron paso por el campamento de los Filisteos, y sacando agua del pozo de Belén queestabajunto a la puerta,se lallevaron ylatrajeron a David. Pero él no quiso beberla, sino que la derramó para el Señor,

17 y dijo: “Lejos esté de mí, oh Señor, que yo haga esto. ¿Beberéla sangre de los hombres que fueron conriesgo desus vidas?” Por eso no quiso beberla. Estas cosas hicieron los tres valientes.

18 Y Abisai, hermano de Joab, hijo de Sarvia, era jefe de los treinta. Y éste blandió su lanza contra 300 y los mató, y tuvo tanto renombre como los tres.

19 Elerael más distinguido de los treinta, por eso llegó a ser su jefe; pero no igualó a los tresprimeros.

20 Benaía, hijo de Joiada, hijo de un valiente de Cabseel, de grandes hazañas, mató a los doshijos deAriel de Moab. Y él descendió y mató a un león en medio de un foso un día que estaba nevando.

21 También mató a un Egipcio, un hombre de aparienciaimpresionante.El Egipcioteníauna lanza en la mano, peroBenaíadescendió a él con un palo, y arrebatando la lanza de la mano del Egipcio, lo mató con su propia lanza.

22 Estascosashizo Benaía, hijo de Joiada, y tuvo tanto renombre como los tres valientes.

23 Fue el más distinguido entre los treinta, pero no igualó a los tres; y David lo puso sobre su guardia.

24 Asael, hermano de Joab,estabaentre los treinta;también,Elhanán, hijo de Dodo de Belén,

25 Sama el Harodita, Elica el Harodita,

26 Heles el Paltita, Ira, hijo de Iques el Tecoíta,

27 Abiezer el Anatotita, Mebunai el Husatita,

28 Salmón el Ahohíta, Maharai el Netofatita,

29 Heleb, hijo de Baana el Netofatita, Itai, hijo de Ribai de Guibeá de los Benjamitas,

30 Benaía el Piratonita, Hidai de los arroyos de Gaas,

31 Abi Albón el Arbatita, Azmavet el Barhumita,

32 Eliaba el Saalbonita, los hijos de Jasén, Jonatán,

33 Sama el Ararita, Ahíam, hijo de Sarar el Ararita,

34 Elifelet, hijo de Ahasbai, hijo de Maaca, Eliam, hijo de Ahitofel el Gilonita,

35 Hezrai el Carmelita, Paarai el Arbita,

36 Igal, hijo de Natán de Soba, Bani el Gadita,

37 Selec el Amonita, Naharai el Beerotita, escuderos de Joab, hijo de Sarvia,

38 Ira el Itrita, Gareb el Itrita,

39 Urías el Hitita; treinta y siete en total.

2 Samuel 24

Censo del Pueblo y Castigo de Dios

1 De nuevo la ira del Señorse encendió contra Israel, y provocó a David contra ellos y dijo: “Ve, haz un censo de Israel y de Judá.”

2 Y el rey dijo a Joab, comandante del ejército, queestabacon él: “Recorre todas las tribus de Israel, desde Dan hasta Beerseba, y haz un censo del pueblo para que yo sepa el número de la gente.”

3 Pero Joab respondió al rey: “Que el Señorsu Dios añada al pueblo cien veces más de lo que son, mientrastodavíavean los ojos de mi señor el rey; pero, ¿por qué se complace mi señor el rey en esto?”

4 Sin embargo, la palabra del rey prevaleció contra Joab y contra los jefes del ejército. Salieron, pues, Joab y los jefes del ejército de la presencia del rey para hacer el censo del pueblo de Israel.

5 Pasaron el Jordán y acamparon en Aroer, a la derecha de la ciudad que está en medio del Valle de Gad, y en dirección a Jazer.

6 Luego fueron a Galaad y a la tierra de Tahtim Hodsi; fueron a Dan Jaán y doblaron para Sidón.

7 Fueron a la fortaleza de Tiro y a todas las ciudades de los Heveos y de los Cananeos, saliendofinalmentehacia el sur de Judá,aBeerseba.

8 Habiendo recorrido todo el país, volvieron a Jerusalén después de nueve meses y veinte días.

9 Joab dio al rey la cifra del censo del pueblo: había en Israel 800,000 hombres valientes que sacaban espada, y los de Judáeran500,000 hombres.

10 Después que David contó el pueblo le pesó en su corazón. Y David dijo al Señor: “He pecado en gran manera por lo que he hecho. Pero ahora, oh Señor, Te ruego que quites la iniquidad de Tu siervo, porque he obrado muy neciamente.”

11 Cuando David se levantó por la mañana, la palabra del Señorvino al profeta Gad, vidente de David, diciendo:

12 “Ve y dile a David: ‘Así dice el Señor: “Te ofrezco tres cosas; escoge para ti una de ellas, para que Yo la haga.”‘”

13 Así que Gad fue a David y se lo hizo saber, diciéndole:”¿Quieres quete vengan siete años de hambre en tu tierra, o que huyas por tres meses delante de tus enemigos mientras te persiguen, o que haya tres días de pestilencia en tu tierra? Considera ahora, y mira qué respuesta he de dar al que me envió.”

14 David respondió a Gad: “Estoy muy angustiado. Te ruego que nos dejes caer en manos del Señorporque grandes son Sus misericordias, pero no caiga yo en manos de hombre.”

15 Y el Señorenvió pestilencia sobre Israel desde la mañana hasta el tiempo señalado; y desde Dan hasta Beerseba murieron 70,000 hombres del pueblo.

16 Cuando el ángel extendió su mano hacia Jerusalén para destruirla, el Señorse arrepintió del mal, y dijo al ángel que destruía al pueblo: “¡Basta! ¡Detén ahora tu mano!” Y el ángel del Señorestaba junto a la era de Arauna el Jebuseo.

17 Entonces David habló al Señor, cuando vio al ángel que hería al pueblo, y dijo: “Yo soy el que ha pecado, y yo soy el que ha hecho mal; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Te ruego que Tu mano caiga sobre mí y sobre la casa de mi padre.”

18 Y Gad vino a David aquel día y le dijo: “Sube, edifica un altar al Señoren la era de Arauna el Jebuseo.”

19 David subió conforme a la palabra de Gad, tal como el Señorhabía ordenado.

20 Y Arauna miró y vio al rey y a sus siervos que venían hacia él; y saliendo Arauna, se postró rostro en tierra delante del rey.

21 Entonces Arauna dijo: “¿Por qué ha venido mi señor el rey a su siervo?” Y David respondió: “A comprarte la era para edificar un altar al Señora fin de detener la plaga del pueblo.”

22 Y Arauna dijo a David: “Tome y ofrezca mi señor el rey loque parezcabien a sus ojos. Mire, los bueyes para el holocausto, y los trillos y los yugos de los bueyes para la leña.

23 Todo, oh rey, Arauna lo da al rey.” “Que el Señorsu Dios le sea propicio,” dijo Arauna al rey.

24 Pero el rey dijo a Arauna: “No, sino que ciertamente por precio telocompraré, pues no ofreceré al Señormi Dios holocausto que no me cueste nada.” Y David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos (570 gramos) de plata.

25 Y allí edificó David un altar al Señor, y ofreció holocaustos y ofrendas de paz. El Señorescuchó la súplica por la tierra y la plaga fue detenida en Israel.

1 Samuel 1

Oración de Ana

1 Había un hombre de Ramataim de Zofim, de la región montañosa de Efraín, que se llamaba Elcana, hijo de Jeroham, hijo de Eliú, hijo de Tohu, hijo de Zuf, el Efrateo.

2 Elcana tenía dos mujeres: el nombre de unaeraAna y el de la otra Penina. Penina tenía hijos, pero Ana no los tenía.

3 Todos los años aquel hombre subía de su ciudad para adorar y ofrecer sacrificio al Señorde los ejércitos en Silo. Allí los dos hijos de Elí, Ofni y Finees, eran sacerdotes del Señor.

4 Cuando llegaba el día en que Elcana ofrecía sacrificio, daba porciones a Penina su mujer y a todos sus hijos e hijas;

5 pero a Ana le daba una doble porción, pues él amaba a Ana, aunque el Señorno le había dado hijos.

6 Su rival, Penina, la provocaba amargamente para irritarla, porque el Señorno le había dado hijos.

7 Esto sucedía año tras año; siempre que ella subía a la casa del Señor, Penina la provocaba, por lo que Ana lloraba y no comía.

8 Entonces Elcana su marido le dijo: “Ana, ¿por qué lloras y no comes? ¿Por qué está triste tu corazón? ¿No soy yo para ti mejor que diez hijos?”

9 Pero Ana se levantó después de haber comido y bebido estando en Silo, ymientrasel sacerdote Elí estaba sentado en la silla junto al poste de la puerta del templo del Señor,

10 ella, muy angustiada, oraba al Señory lloraba amargamente.

11 Entonces hizo voto y dijo: “Oh Señorde los ejércitos, si Te dignas mirar la aflicción de Tu sierva, Te acuerdas de mí y no Te olvidas de Tu sierva, sino que das un hijo a Tu sierva, yo lo dedicaré al Señorpor todos los días de su vida y nunca pasará navaja sobre su cabeza.”

12 Mientras ella continuaba en oración delante del Señor, Elí le estaba observando la boca.

13 Pero Ana hablaba en su corazón, sólo sus labios se movían y su voz no se oía. Elí, pues, pensó que estaba ebria.

14 Entonces Elí le dijo: “¿Hasta cuándo estarás embriagada? Echa de ti tu vino.”

15 Pero Ana respondió: “No, señor mío, soy una mujer angustiada en espíritu. No he bebido vino ni licor, sino que he derramado mi alma delante del Señor.

16 No tenga a su sierva por mujer indigna. Hasta ahora he estado orando a causa de mi gran congoja y aflicción.”

17 “Ve en paz,” le respondió Elí; “y que el Dios de Israel te conceda la petición que Le has hecho.”

18 “Halle su sierva gracia ante sus ojos,” le dijo ella. Entonces la mujer se puso en camino, comió y ya no estabatristesu semblante.

Nacimiento y Dedicación de Samuel

19 A la mañana siguiente se levantaron bien temprano, adoraron delante del Señory regresaron de nuevo a su casa en Ramá. Y Elcana se llegó a Ana su mujer, y el Señorse acordó de ella.

20 Y a su debido tiempo, después de haber concebido, Ana dio a luz un hijo, y le puso por nombre Samuel (Oído por Dios),diciendo:”Porque se lo he pedido al Señor.”

21 Subió el varón Elcana con toda su casa a ofrecer al Señorel sacrificio anual ya pagarsu voto.

22 Pero Ana no subió, pues dijo a su marido: “No subiréhasta que el niño sea destetado. Entonces lo llevaré para que se presente delante del Señory se quede allí para siempre.”

23 Elcana su marido le dijo: “Haz lo que mejor te parezca. Quédate hasta que lo hayas destetado; solamente confirme el SeñorSu palabra.” Ana se quedó y crió a su hijo hasta que lo destetó.

24 Después de haberlo destetado, llevó consigo al niño, y lo trajo a la casa del Señoren Silo, aunque el niño era pequeño. También llevó un novillo de tres años, un efa (22 litros) de harina y un odre de vino.

25 Entonces sacrificaron el novillo, y trajeron el niño a Elí.

26 “¡Oh señor mío!” dijo Ana. “Vive su alma, señor mío. Yo soy la mujer que estuvo aquí junto a usted orando al Señor.

27 Por este niño oraba, y el Señorme ha concedido la petición que le hice.

28 Por lo cual yo también lo he dedicado al Señor. Todos los días de su vida estará dedicado al Señor.” Y adoró allí al Señor.

1 Samuel 2

Cántico de Ana

1 Entonces Ana oró y dijo: “Mi corazón se regocija en el Señor, Mi fortaleza en el Señorse exalta; Mi boca habla sin temor contra mis enemigos, Por cuanto me regocijo en Tu salvación.

2 No hay santo como el Señor; En verdad, no hay otro fuera de Ti, Ni hay roca como nuestro Dios.

3 No se jacten más ustedes con tanto orgullo, No salga la arrogancia de su boca. Porque el Señores Dios de sabiduría, Y por El son pesadas las acciones.

4 Quebrados son los arcos de los fuertes, Pero los débiles se ciñen de poder.

5 Los que estaban saciados se alquilan por pan, Y dejande tener hambrelos que estaban hambrientos. Aun la estéril da a luz a siete, Pero la que tiene muchos hijos desfallece.

6 El Señorda muerte y da vida; Hace bajar al Seol (región de los muertos) y hace subir.

7 El Señorempobrece y enriquece; Humilla y también exalta.

8 Levanta del polvo al pobre, Del muladar levanta al necesitado Para hacerlossentar con los príncipes, Y heredar un sitio de honor; Pues las columnas de la tierra son del Señor, Y sobre ellas ha colocado el mundo.

9 El guarda los pies de Sus santos, Pero los malvados son acallados en tinieblas, Pues no por la fuerza ha de prevalecer el hombre.

10 Los que se oponen al Señorserán quebrantados, El tronará desde los cielos contra ellos. El Señorjuzgará los confines de la tierra, Dará fortaleza a Su rey, Y ensalzará el poder de Su ungido.”

11 Entonces Elcana regresó a Ramá, a su casa. Y el niño Samuelse quedósirviendo al Señordelante del sacerdote Elí.

El Pecado de los Hijos de Elí

12 Pero los hijos de Elíeranhombres indignos; no conocían al Señor

13 ni la costumbre de los sacerdotes con el pueblo: cuando alguien ofrecía sacrificio, venía el criado del sacerdote con un tenedor de tres dientes en su mano mientras se cocía la carne,

14 lo introducía en la cazuela, la olla, la caldera o el caldero, y todo lo que el tenedor sacaba, lo tomaba el sacerdote para sí. Así hacían ellos en Silo con todos los Israelitas que iban allí.

15 Además, antes de quemar la grasa, el criado del sacerdote venía y decía al hombre que ofrecía el sacrificio: “Da al sacerdote carne para asar, pues no aceptará de ti carne cocida, sino solamente cruda.”

16 Y si el hombre le decía: “¿Ciertamente deben quemar primero la grasa y después toma todo lo que quieras;” él respondía: “No, sino queme ladarás ahora, y si no la tomaré por la fuerza.”

17 El pecado de los jóvenes era muy grande delante del Señor, porque despreciaban la ofrenda del Señor.

Los Hijos de Ana

18 Samuel, siendo niño, ministraba delante del Señorusando un efod de lino.

19 Su madre le hacía una túnica pequeña cada año, y se la traía cuando subía con su marido a ofrecer el sacrificio anual.

20 Entonces Elí bendecía a Elcana y a su mujer, y decía: “Que el Señorte dé hijos de esta mujer en lugar del que ella dedicó al Señor.” Y regresaban a su casa.

21 El Señorvisitó a Ana, y ella concibió y dio a luz tres hijos y dos hijas. Y el niño Samuel crecía delante del Señor.

Elí Reprende a sus Hijos

22 Elíera yamuy anciano; y oyó todo lo que sus hijos estaban haciendo a todo Israel, y cómo se acostaban con las mujeres que servían a la entrada de la tienda de reunión,

23 y les preguntó: “¿Por qué hacen estas cosas, las cosas malas de que oigohablar atodo este pueblo?

24 No, hijos míos; porque no es bueno el informe que oigo circular por el pueblo del Señor.

25 Si un hombre peca contra otro, Dios mediará por él; pero si un hombre peca contra el Señor, ¿quién intercederá por él?” Pero ellos no escucharon la voz de su padre, porque el Señorquería que murieran.

26 Y el niño Samuel crecía en estatura y en gracia para con el Señory para con los hombres.

Profecía contra la Casa de Elí

27 Entonces un hombre de Dios vino a Elí y le dijo: “Así dice el Señor: ‘¿Nome revelé ciertamente a la casa de tu padre cuando ellos estaban en Egiptocomo esclavosde la casa de Faraón?

28 ‘¿Nolos escogí de entre todas las tribus (la de Leví) de Israel para ser Mis sacerdotes, para subir a Mi altar, para quemar incienso, para llevar un efod delante de Mí? ¿Nole di a la casa de tu padre todas las ofrendas encendidas de los Israelitas?

29 ‘¿Por qué pisotean Mi sacrificio y Mi ofrenda que he ordenadoen Mimorada, y honras a tus hijos más que a Mí, engordándose ustedes con lo mejor de cada ofrenda de Mi pueblo Israel?’

30 Por tanto, el Señor, Dios de Israel, declara: ‘Ciertamente Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de Mí para siempre;’ pero ahora el Señordeclara: ‘Lejos esté esto de Mí, porque Yo honraré a los que Me honran, y los que Me desprecian serán tenidos en poco.

31 Por tanto, vienen días cuando cortaré tu fuerza, y la fuerza de la casa de tu padre, y no habrá anciano en tu casa.

32 Y verás la angustia deMimorada, apesar detodo el bien que hago a Israel; y nunca habrá anciano en tu casa.

33 Sin embargo, a algunos de los tuyos no cortaré de Mi altar para que tus ojos se consumanllorandoy tu alma sufra; pero todos los nacidos en tu casa morirán en la flor de la juventud.

34 Y para ti, ésta será la señal que vendrá en cuanto a tus dos hijos, Ofni y Finees: en el mismo día morirán los dos.

35 Pero levantaré para Mí un sacerdote fiel que hará conforme alos deseosde Mi corazón y de Mi alma; y le edificaré una casa duradera, y él andará siempre delante de Mi ungido.

36 Y todo aquél que haya quedado de tu casa vendrá y se postrará ante él por una moneda de plata o una torta de pan, y le dirá: “Asígname a uno de los oficios sacerdotales paraque puedacomer un bocado de pan.”‘”

1 Samuel 3

Dios Llama a Samuel

1 El joven Samuel servía (ministraba) al Señoren presencia de Elí. La palabra del Señorescaseaba en aquellos días, y las visiones no eran frecuentes.

2 Y aconteció un día, estando Elí acostado en su aposento (sus ojos habían comenzado a oscurecerseyno podía verbien),

3 cuando la lámpara de Dios aún no se había apagado y Samuel estaba acostado en el templo del Señordondeestabael arca de Dios,

4 que el Señorllamó a Samuel, y él respondió: “Aquí estoy.”

5 Entonces corrió a Elí y le dijo: “Aquí estoy, pues me llamaste.” Pero Elílerespondió: “Yo no he llamado, vuelve a acostarte.” Y él fue y se acostó.

6 El Señorlo volvió a llamar: “¡Samuel!” Y Samuel se levantó, fue a Elí y le dijo: “Aquí estoy, pues me llamó.” Elí respondió: “Yo no te he llamado, hijo mío, vuelve a acostarte.”

7 Y Samuel no conocía aún al Señor, ni se le había revelado aún la palabra del Señor.

8 El Señorvolvió a llamar a Samuel por tercera vez. Y él se levantó, fue a Elí y le dijo: “Aquí estoy, pues me llamó.” Entonces Elí comprendió que el Señorestaba llamando al muchacho.

9 Y Elí dijo a Samuel: “Ve y acuéstate, y si El te llama, dirás: ‘Habla, Señor, que Tu siervo escucha.'” Y Samuel fue y se acostó en su aposento.

10 Entonces vino el Señory se detuvo, y llamó como en las otras ocasiones: “¡Samuel, Samuel!” Y Samuel respondió: “Habla, que Tu siervo escucha.”

11 Y el Señordijo a Samuel: “Estoy a punto de hacer una cosa en Israel la cual hará retumbar ambos oídos a todo aquél que la oiga.

12 Ese día cumpliré contra Elí todo lo que he hablado sobre su casa, desde el principio hasta el fin.

13 Porque le he hecho saber que estoy a punto de juzgar su casa para siempre a causa de la iniquidad de la cual él sabía, pues sus hijos trajeron sobre sí una maldición, y él no los reprendió.

14 Por tanto he jurado a la casa de Elí que la iniquidad de su casa no será expiada jamás, ni con sacrificio ni con ofrenda.”

15 Samuel se acostó hasta la mañana. Entonces abrió las puertas de la casa del Señor; pero Samuel temía contar la visión a Elí.

16 Así que Elí llamó a Samuel, y le dijo: “Samuel, hijo mío.” “Aquí estoy,” respondió Samuel.

17 Y Elí dijo: “¿Cuál es la palabra queelSeñor} te habló? Te ruego que no me la ocultes. Así te haga Dios, y aún más, si me ocultas algo de todas las palabras que El te habló.”

18 Entonces Samuel se lo contó todo, sin ocultarle nada. YElídijo: “El es el Señor; que haga lo que bien Le parezca.”

19 Samuel creció, y el Señorestaba con él. No dejó sin cumplimiento ninguna de sus palabras.

20 Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, supo que Samuel había sido confirmado como profeta del Señor.

21 Y el Señorse volvió a aparecer en Silo. Porque el Señorse revelaba a Samuel en Silo por la palabra del Señor.

1 Samuel 4

Los Filisteos Derrotan a Israel

1 La palabra de Samuel llegaba a todo Israel. Cuando Israel salió para enfrentarse en batalla con los Filisteos, acampó junto a Ebenezer, mientras que los Filisteos habían acampado en Afec.

2 Los Filisteos se pusieron en orden de batalla para enfrentarse a Israel. Entablado el combate, Israel fue derrotado delante de los Filisteos, quienes mataron como a 4,000 hombres en el campo de batalla.

3 Cuando el pueblo volvió al campamento, los ancianos de Israel dijeron: “¿Por qué nos ha derrotado hoy el Señordelante de los Filisteos? Tomemos con nosotros, de Silo, el arca del pacto del Señor, para que vaya en medio de nosotros y nos libre del poder de nuestros enemigos.”

4 El pueblo envió gente a Silo, y trajeron de allí el arca del pacto del Señorde los ejércitos que estásobrelos querubines. Los dos hijos de Elí, Ofni y Finees,estabanallí con el arca del pacto de Dios.

5 Y aconteció que cuando el arca del pacto del Señorentró al campamento, todo Israel gritó con voz tan fuerte que la tierra tembló.

6 Al oír los Filisteos el ruido del clamor, dijeron: “¿Quésignificael ruido de este gran clamor en el campamento de los Hebreos?” Entonces comprendieron que el arca del Señorhabía llegado al campamento.

7 Y los Filisteos tuvieron temor, pues dijeron: “Dios ha venido al campamento.” Y añadieron: “¡Ay de nosotros! Porque nada como esto ha sucedido antes.

8 ¡Ay de nosotros! ¿Quién nos librará de la mano de estos dioses poderosos? Estos son los dioses que hirieron a los Egipcios en el desierto con todaclase deplagas.

9 Cobren ánimo y sean hombres, oh Filisteos, para que no lleguen a ser esclavos de los Hebreos como ellos han sido esclavos de ustedes. Sean hombres, pues, y peleen.”

10 Los Filisteos pelearon, Israel fue derrotado y cada cual huyó a su tienda; la mortandad fue muy grande, pues de Israel cayeron 30,000 soldados de a pie.

11 El arca de Dios fue capturada, y murieron Ofni y Finees, los dos hijos de Elí.

Muerte de Elí

12 Y un hombre de Benjamín corrió del campo de batalla, y llegó aquel mismo día a Silo, con sus vestidos rotos y polvo sobre su cabeza.

13 Cuando llegó, Elí estaba sentado ensuasiento junto al camino esperando ansiosamente, porque su corazón temblaba por causa del arca de Dios. Así pues, el hombre fue a anunciarloen la ciudad, y toda la ciudad prorrumpió en gritos.

14 Al oír Elí el ruido de los gritos, dijo: “¿Quésignificael ruido de este tumulto?” Entonces el hombre se acercó apresuradamente y dio la noticia a Elí.

15 Elí tenía noventa y ocho años, sus ojos se habían cegado y no podía ver.

16 El hombre le dijo a Elí: “Yo soy el que vine del campo de batalla. Hoy escapé del campo de batalla.” “¿Cómo fueron las cosas, hijo mío?” preguntó Elí.

17 El que trajo la noticia respondió: “Israel ha huido delante de los Filisteos, además ha habido gran matanza entre el pueblo, también han muerto tus dos hijos, Ofni y Finees, y el arca de Dios ha sido tomada.”

18 Cuando mencionó el arca de Dios,Elícayó de su asiento hacia atrás, junto a la puerta, se rompió la nuca y murió, pueseraentrado en años y pesaba mucho. Elí había juzgado a Israel durante cuarenta años.

19 Su nuera, la mujer de Finees, estaba encinta y a punto de dar a luz, y al oír la noticia que el arca de Dios había sido tomada y que su suegro y su marido habían muerto, se arrodilló y dio a luz, porque le sobrevinieron los doloresde parto.

20 Al tiempo que moría, las mujeres que estaban junto a ella le dijeron: “No temas, porque has dado a luz un hijo.” Ella no respondió ni prestó atención.

21 Pero llamó al niño Icabod (Sin gloria) y dijo: “¡Se ha ido la gloria de Israel!” por haber sido tomada el arca de Dios, y porla muerte desu suegro y de su marido.

22 Ella dijo: “Se ha ido la gloria de Israel, porque el arca de Dios ha sido tomada.”

1 Samuel 5

El Arca en Manos de los Filisteos

1 Los Filisteos tomaron el arca de Dios y la llevaron de Ebenezer a Asdod.

2 Entonces los Filisteos tomaron el arca de Dios y la introdujeron en el templo de Dagón, y la pusieron junto a Dagón.

3 A la mañana siguiente, cuando los de Asdod se levantaron temprano, vieron que Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del Señor. Así que tomaron a Dagón y lo pusieron otra vez en su lugar.

4 Pero al levantarse temprano al día siguiente, otra vez Dagón había caído rostro en tierra delante del arca del Señor. Y la cabeza de Dagón y las dos palmas de sus manosestabancortadas sobre el umbral; sólo el tronco le quedaba a Dagón.

5 Por tanto, hasta hoy, ni los sacerdotes de Dagón ni ninguno de los que entran en el templo de Dagón, pisan el umbral de Dagón en Asdod.

6 Y la mano del Señorse hizo pesada sobre los de Asdod, y los desoló y los hirió con tumores, tanto a Asdod como a sus territorios.

7 Cuando los hombres de Asdod vieron lo que les sucedía, dijeron: “El arca del Dios de Israel no debe quedar con nosotros, pues su mano es dura sobre nosotros y sobre Dagón nuestro dios.”

8 Así que enviaron a buscar e hicieron venir a todos los príncipes de los Filisteos, y les dijeron: “¿Qué haremos con el arca del Dios de Israel?” “Que se traslade el arca del Dios de Israel a Gat,” respondieron ellos. Y trasladaron el arca del Dios de Israel.

9 Pero después que la habían trasladado, la mano del Señorestuvo contra la ciudadcausandogran confusión; e hirió a los hombres de la ciudad, desde el menor hasta el mayor, saliéndoles tumores.

10 Entonces enviaron el arca de Dios a Ecrón. Y sucedió que cuando el arca de Dios llegó a Ecrón, los Ecronitas clamaron y dijeron: “Han traído el arca del Dios de Israel hasta nosotros para matarnos a nosotros y a nuestro pueblo.”

11 Por tanto, mandaron a reunir a todos los príncipes de los Filisteos, y les dijeron: “Saquen de aquí el arca del Dios de Israel, y que vuelva a su sitio, para que no nos mate a nosotros y a nuestro pueblo.” Porque había un pánico mortal por toda la ciudad; la mano de Dios se hizo muy pesada allí.

12 Y los hombres que no murieron fueron heridos con tumores, y el clamor de la ciudad subió hasta el cielo.

1 Samuel 6

Los Filisteos Devuelven el Arca

1 El arca del Señorhabía estado siete meses en la tierra de los Filisteos.

2 Entonces los Filisteos llamaron a los sacerdotes y a los adivinos y les preguntaron: “¿Qué haremos con el arca del Señor? Dígannos cómo la hemos de enviar a su lugar.”

3 Y ellos contestaron: “Si envían el arca del Dios de Israel, no la envíen vacía; sino que ciertamente devolverán a Dios una ofrenda por la culpa. Entonces serán sanados y sabrán por qué Su mano no se ha apartado de ustedes.”

4 Ylos Filisteospreguntaron: “¿Cuál será la ofrenda por la culpa que Le hemos de devolver?” Y ellos dijeron: “Cinco tumores de oro y cinco ratones de oroconformeal número de los príncipes de los Filisteos, porque la misma plagaestuvosobre todos ustedes y sobre sus príncipes.

5 Harán, pues, semejanzas de sus tumores, y semejanzas de sus ratones que asolan la tierra, y darán gloria al Dios de Israel. Tal vez El alivie Su mano de sobre ustedes, de sobre sus dioses y de sobre su tierra.

6 ¿Por qué entonces endurecen sus corazones, como endurecieron sus corazones los Egipcios y Faraón? Cuando El los trató severamente, ¿no dejaron ir al pueblo, y ellos se fueron?

7 Ahora pues, tomen y preparen un carro nuevo y dos vacas con crías sobre las cuales no se haya puesto ningún yugo. Aten las vacas al carro y lleven sus becerros a casa, lejos de ellas.

8 Tomen el arca del Señory colóquenla en el carro; y pongan en una caja a su lado los objetos de oro que Le entregarán como ofrenda por la culpa. Luego, déjenla ir, y que se vaya.

9 Y observen bien: si sube por el camino de su territorio a Bet Semes, entonces El nos ha hecho este gran mal. Pero si no, entonces sabremos que no fue Su mano la que nos hirió; nos sucedió por casualidad.”

10 Entonces los hombres lo hicieron así. Tomaron dos vacas con crías, las ataron al carro y encerraron sus becerros en casa.

11 Colocaron el arca del Señoren el carro, y la caja con los ratones de oro y las semejanzas de sus tumores.

12 Y las vacas tomaron el camino recto en dirección a Bet Semes. Iban por el camino, mugiendo mientras iban, y no se desviaron ni a la derecha ni a la izquierda. Los príncipes de los Filisteos las siguieron hasta el límite de Bet Semes.

13 El pueblo deBet Semes estaba segando el trigo en el valle, y alzaron sus ojos y al ver el arca, se alegraron al verla.

14 El carro llegó al campo de Josué el Bet Semita y se detuvo allí dondehabíauna gran piedra; y ellos partieron la madera del carro y ofrecieron las vacas en holocausto al Señor.

15 Los Levitas bajaron el arca del Señory la caja que estaba con ella, en la cual estaban los objetos de oro, y las colocaron sobre la piedra grande. Entonces los hombres de Bet Semes ofrecieron holocaustos e hicieron sacrificios aquel día al Señor.

16 Cuando los cinco príncipes de los Filisteos vieronesto,regresaron a Ecrón el mismo día.

17 Estos son los tumores de oro que los Filisteos entregaron como ofrenda por la culpa al Señor: uno por Asdod, uno por Gaza, uno por Ascalón, uno por Gat y uno por Ecrón;

18 y ratones de oroconformeal número de todas las ciudades de los Filisteos que pertenecían a los cinco príncipes, tanto de ciudades fortificadas como de aldeas sin murallas. La piedra grande sobre la cual colocaron el arca del Señores testigohasta el día de hoy en el campo de Josué el Bet Semita.

19 El Señorhirió a los hombres de Bet Semes porque habían mirado dentro del arca del Señor. De todo el pueblo hirió a 50,070 hombres, y el pueblo lloró porque el Señorhabía herido al pueblo con gran mortandad.

20 Y los hombres de Bet Semes dijeron: “¿Quién puede estar delante del Señor, este Dios santo? ¿Y a quién subiráal alejarsede nosotros?”

21 Entonces enviaron mensajeros a los habitantes de Quiriat Jearim y le dijeron: “Los Filisteos han devuelto el arca del Señor; desciendan,yllévenla con ustedes.”

1 Samuel 7

El Arca en Quiriat Jearim

1 Los hombres vinieron de Quiriat Jearim, tomaron el arca del Señory la llevaron a la casa de Abinadab en la colina, y consagraron a Eleazar su hijo para que guardara el arca del Señor.

2 Pero pasó mucho tiempo, veinte años, desde el día en que el arca quedó en Quiriat Jearim; y toda la casa de Israel añoraba al Señor.

3 Entonces Samuel habló a toda la casa de Israel: “Si es que ustedes se vuelven al Señorcon todo su corazón, entonces quiten de entre ustedes los dioses extranjeros y a Astarot, y dirijan su corazón al Señor, y sírvanle sólo a El; y El los librará de la mano de los Filisteos.”

4 Los Israelitas quitaron a los Baales y a Astarot, y sirvieron sólo al Señor.

5 Y Samuel dijo: “Reúnan en Mizpa a todo Israel, y yo oraré al Señorpor ustedes.”

6 Se reunieron los Israelitas en Mizpa, y sacaron agua yladerramaron delante del Señor, ayunaron aquel día y dijeron allí: “Hemos pecado contra el Señor.” Y Samuel juzgó a los Israelitas en Mizpa.

7 Cuando los Filisteos oyeron que los Israelitas se habían reunido en Mizpa, los príncipes de los Filisteos subieron contra Israel. Cuando oyeron esto los Israelitas, tuvieron temor de los Filisteos.

8 Entonces los Israelitas dijeron a Samuel: “No dejes de clamar al Señornuestro Dios por nosotros, para que El nos libre de la mano de los Filisteos.”

9 Tomó Samuel un cordero de leche y lo ofreció como completo holocausto al Señor; y clamó Samuel al Señorpor Israel y el Señorle respondió.

10 Mientras Samuel estaba ofreciendo el holocausto, los Filisteos se acercaron para pelear con Israel. Pero el Señortronó con gran estruendo aquel día contra los Filisteos y los confundió, y fueron derrotados delante de Israel.

11 Saliendo de Mizpa los hombres de Israel, persiguieron a los Filisteos, hiriéndolos hasta más allá de Bet Car.

Derrota de los Filisteos

12 Entonces Samuel tomó una piedra y la colocó entre Mizpa y Sen, y la llamó Ebenezer (Piedra de Ayuda) y dijo: “Hasta aquí nos ha ayudado el Señor.”

13 Los Filisteos fueron sometidos y no volvieron más dentro de los límites de Israel. Y la mano del Señorestuvo contra los Filisteos todos los días de Samuel.

14 Las ciudades que los Filisteos habían tomado de Israel fueron restituidas a Israel, desde Ecrón hasta Gat, e Israel libró su territorio de la mano de los Filisteos. Y hubo paz entre Israel y los Amorreos.

15 Samuel juzgó a Israel todos los días de su vida.

16 Cada año acostumbraba hacer un recorrido por Betel, Gilgal y Mizpa, y juzgaba a Israel en todos estos lugares.

17 Después volvía a Ramá, pues allíestabasu casa, y allí juzgaba a Israel; y edificó allí un altar al Señor.

1 Samuel 8

El Pueblo Pide Rey

1 Cuando Samuelyaera viejo, puso a sus hijos como jueces sobre Israel.

2 El nombre de su primogénito era Joel, y el nombre del segundo, Abías;éstosjuzgaban en Beerseba.

3 Pero sus hijos no anduvieron en los caminos de su padre, sino que se desviaron tras ganancias deshonestas, aceptaron sobornos y pervirtieron el derecho.

4 Entonces se reunieron todos los ancianos de Israel y fueron a Samuel en Ramá,

5 y le dijeron: “Mira, has envejecido y tus hijos no andan en tus caminos. Ahora pues, danos un rey para que nos juzgue, como todas las naciones.”

6 Pero fue desagradable a los ojos de Samuel que dijeran: “Danos un rey que nos juzgue.” Y Samuel oró al Señor.

7 Y el Señordijo a Samuel: “Escucha la voz del pueblo en cuanto a todo lo que te digan, pues no te han desechado a ti, sino que Me han desechado a Mí para que Yo no sea rey sobre ellos.

8 Así como todas las obras que han hecho desde el día en que los saqué de Egipto hasta hoy, abandonándome y sirviendo a otros dioses, así lo están haciendo contigo también.

9 Ahora pues, oye su voz. Sin embargo, les advertirás solemnemente y les harás saber el proceder del rey que reinará sobre ellos.”

10 Entonces Samuel habló todas las palabras del Señoral pueblo que le había pedido rey.

11 Y dijo: “Así será el proceder del rey que reinará sobre ustedes: tomará a sus hijos,lospondrá a su servicio en sus carros y entre su gente de a caballo, y correrán delante de sus carros reales.

12 El rey nombrará para su servicio jefes de mil y de cincuenta, ya otrospara labrar sus campos y recoger sus cosechas, y hacer sus armas de guerra y pertrechos para sus carros.

13 También tomará a sus hijas para perfumistas, cocineras y panaderas.

14 Les tomará lo mejor de sus campos, de sus viñedos y de sus olivares yse losdará a sus siervos.

15 De su grano y de sus viñas tomará el diezmo, para darloa sus oficiales y a sus siervos.

16 Les tomará también sus siervos y sus siervas, sus mejores jóvenes y sus asnos, ylosusará para su servicio.

17 De sus rebaños tomará el diezmo, y ustedes mismos vendrán a ser sus siervos.

18 Ese día clamarán por causa de su rey a quien escogieron para ustedes, pero el Señorno les responderá en ese día.”

19 No obstante, el pueblo rehusó oír la voz de Samuel, y dijeron: “No, sino que habrá rey sobre nosotros,

20 a fin de que seamos como todas las naciones, para que nuestro rey nos juzgue, salga delante de nosotros y dirija nuestras batallas.”

21 Después que Samuel escuchó todas las palabras del pueblo, las repitió a oídos del Señor.

22 Y el Señordijo a Samuel: “Escúchalos y nómbrales un rey.” Entonces Samuel dijo a los hombres de Israel: “Váyase cada uno a su ciudad.”